Santo Remedio

Situación: yo sentado frente a la pc, (como siempre) leyendo blogs y uno en particular me causó mucha gracia, por lo cual, me rio con ganas.
A todo esto, se me acerca Nacho y se da el siguiente diálogo: (si, ahora tengo conversaciones con mi hijo)
Marcelo: jajajaja
Nacho: Asho Papi?
MArcelo: no pasa nada bebé
Nacho: Asho Papi?
Marcelo: Nada hijo, papá se estaba riendo...
Nacho: Asho Papi?
Marcelo (Cambiando de canal al Discovery kids): Mirá! Barney!!
Nacho: arniiiiiiiiiiiiiii
Marcelo: fiuuuuuuuuuu..........
Muñeco pedorro violeta que me vas a servir cuando el nene esté medio molesto. Te debo una.

A pasos agigantados

El crecimiento y aprendizaje de este nene son increíbles, no hablo solamente de su estatura y peso, sino que ademas de eso, sus palabras son cada vez más claras y cuando pide algo últimamente se le entiende bastante bien.
Supongo que el hecho de que vaya a una guardería le hace bien desde el punto de vista de que se relaciona con otros nenes de su edad y tal vez eso provoque que él aprenda muy rápido a hacerse entender.
Además, es muy demostrativo, cuando llego a casa de trabajar, apenas escucha el ruido de las llaves corre hasta la puerta y me recibe con un abrazo en mis piernas, pidiéndome upa, y cuando lo hago, me estampa un beso bien sonoro lleno de caramelo, baba o galletita.
El otro día nos dieron en el jardín una planilla en la que se marcaban los avances de acuerdo a su edad, y nos sorprendió y enorgulleció cómo los resultados se mostraban positivos a la hora de evaluar su predisposición y la manera de comportarse en ese ambiente.
Y apuntando al tema de aprender a hablar, te digo a vos, Nacho, que estoy tan orgulloso de vos, adoro ser tu padre, te amo hijo mio... Pero decirle Boluda a tu mamá, me parece demasiado!